Ceniceros

Hace tantos ceniceros que te espero
hace tantos desayunos que no estás,
la culpa no la tienen los carteros, mi amor
son esas cartas las que nos hacen llorar.

Un amanecer en Bariloche,
un atardecer en Singapur,
por estar en el asiento de tu coche
esta noche, daría todo el oro del Perú.

Y si la luna fuma y se esfuma,
si la razón deja de tener razón.
Será que nada será igual,
que no puedo ser imparcial
entre lo que me hace bien o me hace mal.

Voy a declararte mi inocencia
en todas las cuestiones del amor,
te quiero declarar mi competencia, Florencia
para manejar la situación.

Y si la luna fuma y se esfuma,
si la razón deja de tener razón.
Será que nada será igual,
que no puedo ser imparcial
entre lo que me hace bien o me hace mal.

Si no fuera por el fuego tu traición o mi rencor,
yo podría controlar mi corazón,
será que nada será igual que no puedo ser imparcial.

Entre lo que me hace bien o me hace mal,
entre lo que me hace bien o me hace mal,
entre lo que me hace bien o me hace mal.