Noviando en lo obscurito

estaba yo noviando
en el Chapultepec,
era un día domingo
que lo fui a conocer.
De pronto un policía
me comenzó a correr
diciendo que faltaba
al orden y a la ley.

Allá en mi rancho no existen policías
si me gusta una rora bacilo noche y día,
puedo salir con la rosa o la Charito
no hay ley que me prohíba
noviar en lo obscurito.

Después de mil discursos
directos al riñón,
el poli me decía
no tiene usted razón.
Al hacer lo que hacia
faltaba a la morar
violando así las leyes
del código penal.

Allá en mi rancho no existen policías,
si me gusta una vieja bacilo noche y día,
puedo salir con la rosa o la Charito
no hay ley que me prohíba
noviar en lo obscurito.

Por dármelas de macho
al bote fui a parar,
durante una semana
Me dieron agua y pan.
Y para despedirme
les tuve que barrer
cerca de siete meses.
del gran Chapultepec

Allá en mi rancho no existen policías,
si me gusta una vieja bacilo noche y día,
puedo salir con la rosa o la Charito,
no hay ley que me prohíba
noviar en lo obscurito.